Vivimos en una época en la que es más importante que nunca el ahorro energético y no solamente por estar los precios de la energía por las nubes. Algunas formas de ahorro de energía son evidentes, mientras que otras entran dentro de la rumorología y caemos en trucos que realmente no sirven para ahorrar o la cantidad es ínfima.
Precisamente sobre esos falsos trucos para ahorrar energía ponemos hoy el foco.
Apagar y encender la luz consume más
Si bien es cierto que al encender la luz durante solo un instante se genera un pico en el gasto de energía, al ser tan corto ese instante en el que hemos entrado a una de las habitaciones de casa a coger algo durante apenas unos segundos, realmente no se aprecia en el consumo.
Por tanto, no es cierto que el hecho de apagar y encender salga menos económico que dejar encendida una bombilla o fluorescente durante un tiempo determinado. Hay que hacer un uso responsable de la luz y, si vamos a estar durante unos cuantos minutos necesitados de iluminación, tendrás que dejarla encendida, pero evidentemente saldrá más caro que haber encendido y apagado.
Con las lámparas LED sucede totalmente lo contrario. Aunque muchos compran este tipo de lámparas por ser de bajo consumo, en realidad este bajo consumo sólo se producirá cuando una bombilla está constantemente encendida. Es decir, las lámparas LED gastan más al encenderse y apagarse que al mantenerlas encendidas.
El lavavajillas consume más que fregar a mano
Este es otro de los grandes mitos. Un electrodoméstico tan grande como el lavavajillas produce un gasto eléctrico, eso es evidente. Sin embargo, puede reducir el consumo de agua hasta 30 litros por día, o lo que es lo mismo, consumen alrededor de un 9% menos en el cálculo de energía frente al lavado tradicional.
Así, evidentemente se generará un gasto eléctrico que no tendrás en comparación con simplemente abrir el grifo, que es gratis en electricidad, pero el consumo energético total será más elevado dejando correr el grifo de la pila que con un electrodoméstico especialmente destinado a este fin, que es más eficiente.
El modo standby apenas consume
Dependerá de la necesidad de cada aparato de quedarse en modo espera o standby, el típico modo en el que se quedan con un pilotito rojo, pero según datos del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE) y Eurostar, la cantidad anual que consumen los aparatos en este «modo reposo» supone un gasto anual de 231 kWh.
Para que os hagáis una idea, se estima que el consumo medio anual del ordenador es de 172 kWh y el consumo de un lavavajillas es de 246 kWh, así que no apagar completamente los aparatos eléctricos puede suponerte lo mismo que si tuvieras un ordenador o un lavavajillas más en casa. De hecho, este consumo fantasma supone casi un 5% del consumo en los hogares.
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